Todas las empresas necesitan tener una buena estructura de funcionamiento. Al fin y al cabo, una estructura organizacional puede generar el éxito a corto, mediano y largo plazo. ¿Quieres saber por qué? A continuación, te contamos los modelos que existen.
¿Por qué una estructura organizacional es decisiva para el crecimiento?
Lo primero que hay que mencionar es que no se trata de un modelo totalmente estricto de reglas y jerarquías. En realidad, suele funcionar como una base sobre la cual se gestiona toda la compañía. Entonces, dependerá de cada empresa ver hasta qué punto se puede flexibilizar.
Antes de adentrarnos en todos los tipos de estructuras que existen, es clave comprender que son vitales para el corto, mediano y largo plazo (HubSpot, 2022).
• Corto plazo: Una buena estructura organizacional te permite cumplir con todos los objetivos inmediatos que tengas. El ejemplo claro sucede con las ventas: si tienes un sistema organizado, no incumplirás los pedidos que tengas con determinados clientes. De esta manera, podrás aumentar las ventas exponencialmente.
• Mediano plazo: A medida que crezcas, tendrás nuevas funciones y responsabilidades que afrontar. Por ejemplo, si necesitas contratar personal, observarás que será imposible estar al tanto de toda la cadena de mandos. Por ende, si tienes la estructura correspondiente, podrás garantizar que todas las áreas estén optimizadas y sean productivas.
• Largo plazo: Si buscas crecer, necesitas que la actividad de la empresa se expanda. Por eso, tener la adecuada estructura en tu compañía servirá para que te posiciones como un referente de tu sector. Por ejemplo, si buscas generar una franquicia, primero deberás asegurarte de que es viable mantener la calidad de tu trabajo en cualquier ubicación (HubSpot, 2022).
¿Cuáles son los modelos de estructura organizacional que existen?
¿Te interesa conocer a fondo los diferentes tipos de estructura? Te contamos cuáles son y cuál te conviene en cada caso (OBS Business School, 2021):
• Lineal: Esta clase de estructura es la más básica y simple, ya que una sola persona se encarga de tomar todas las decisiones corporativas. A su vez, tiene otras personas a su cargo, que siempre dependerán de su visto bueno. Se recomienda para las empresas que tengan pocas personas y busquen generar responsabilidades claras para cada tarea.
• Funcional: Es una estructura organizacional tradicional. Básicamente, se trata de un modelo jerárquico donde cada empleado tiene un superior y los equipos se agrupan por especialidades. Es útil para aquellas empresas que están empezando y todavía no tienen demasiados empleados en cada sector.
• Divisional: Se trata de una de las más habituales. Se compone de múltiples estructuras funcionales más pequeñas, por lo que cada división puede tener sus propias subdivisiones, como un equipo de marketing y de ventas propio. Es ideal si manejas una cartera de clientes extensa y quieres delegar el trabajo en equipos especializados para cada uno.
• Proyectual: Este modelo de organización se configura en función de proyectos, procesos u objetivos específicos dentro de una organización. Se suele nombrar a un gerente de proyectos y se crean equipos según roles y metas. Se trata de un armado perfecto para los proyectos temporales importantes de una empresa.
¿Qué pueden aportar la estructura organizacional en productividad y competitividad?
¿Quieres saber cuáles son las ventajas de incorporar una estructura organizacional en tu compañía? Aquí te las explicamos:
Orden
Una buena estructura organizacional generará orden. Básicamente, todos los procesos de tu compañía estarán optimizados, pues esto significa que ninguna persona hará una tarea que no le compete.
Al haber una mejor división del trabajo, la productividad será mayor, debido a que todas las responsabilidades estarán bien definidas. Por lo tanto, procura estructurar tu empresa para asegurar distintas reglas que todos deberán cumplir (Bizneo, 2020).
Crecimiento
Todas las estructuras anteriormente mencionadas permiten un crecimiento constante, ya que todos sabrán lo que deben hacer en distintas circunstancias. Al mismo tiempo, muchos trabajos requerirán una colaboración entre distintos sectores, motivo por el cual todos los proyectos tendrán una visión integral.
El feedback constante formará parte de los procesos de trabajo de tu empresa. Esta suma de visiones de distintas personas en el desarrollo empresarial te hará mejorar (Ionos, 2021).
Estabilidad
Elegir la estructura organizacional adecuada generará estabilidad, ya que los procesos de trabajo serán constantes. Es decir, cuando sepas cuál es la forma ideal de trabajar en tu empresa, podrás adaptar todos los proyectos a este mecanismo.
De esta manera, vas a evitar errores de desorganización, que repercutan negativamente sobre la productividad. Incluso, vas a poder evitar crisis, ya que sabrás cómo actuar ante situaciones que se estén por salirse de control (Cesuma, 2020).
Ventaja competitiva
Puede que las empresas con las que compitas no tengan una buena estructura definida. En consecuencia, sus procesos serán más desorganizados… y ahí es donde puedes obtener una ventaja.
Si los clientes se sienten cómodos con tu manera de trabajar e identifican correctamente las etapas de trabajo, podrás fidelizarlos y diferenciarte de la competencia. Por eso, procura generar una estructura distintiva, que logre cautivar a propios y ajenos (Bizneo, 2020).
Flexibilidad
Si bien todos los procesos de trabajo de tu organización estarán estructurados, eso no significa que no puedas adaptarte a nuevas circunstancias. Al tener definidas las reglas internas de tu compañía, sabrás cuándo puedes implementar modificaciones, necesarias en determinados momentos.
Por ejemplo, si tu empresa busca crecer, puede que necesites incorporar más empleados en tus departamentos. En consecuencia, ellos se adaptarán a un modelo laboral definido, pero estas incorporaciones generarán cambios en la dinámica de trabajo. Si la organización se mantiene, sin dudas la productividad y el valor generado aumentarán (Ionos, 2021).
Valor agregado
Por último, tu organización puede obtener valor agregado al elegir la estructura organizacional adecuada. Por ejemplo, si eliges una estructura divisional, seguramente tu equipo de trabajo se armará en función de las necesidades de los clientes y las aptitudes de tus empleados.
Así, la empresa tendrá un mayor rendimiento en el día a día. Básicamente, porque cada subgrupo se especializará en un sector específico y esto promoverá la generación de valor agregado (Acsendo, 2020).
En definitiva, implementar una buena estructura organizacional es clave para asegurar buenos resultados a futuro. Si quieres encontrar la estructura más adecuada, te invitamos a que conozcas nuestros servicios y te certifiques en una norma de calidad. ¡Nuestros procesos son tu mejor opción para crecer a corto, mediano y largo plazo!